A una semana de la muerte de Carlos Colodro, dos expertos cuestionan la tesis gubernamental del “suicidio”
Siguen las dudas sobre las causas de la muerte de Carlos Colodro

El caso Colodro no está cerrado, advirtió esta semana la Fiscalía. Una semana después de la muerte del interventor del ex Banco Fassil, dos expertos ponen en duda el informe presentado por el Ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, que asegura que Carlos Colodro se suicidó la noche del sábado 27 de mayo tras lanzarse del piso 15 del edificio Ambassador de nuestra capital.
El analista del discurso y medios de comunicación, Max Torres, y el criminólogo, Alejandro Colanzi, denunciaron la contaminación de las primeras pruebas recolectadas por el Ministerio Público y el uso político que le dio Del Castillo a las pericias, en particular de las imágenes captadas por las cámaras del edificio y de la denominada “carta póstuma” del fallecido interventor. En este sentido, coincidieron en concluir que no se puede descartar un suicidio inducido por otras personas que presionaban a Colodro en la crisis financiera que enfrenta el Banco Fassil.
Torres hizo un análisis semiótico de la denominada “carta póstuma” que supuestamente se encontró en la oficina de Colodro en el piso 15 del Ambassador y remarcó que en ella apunta a sus inmediatos superiores como los autores de las presiones que lo llevaron a la extrema medida de quitarse la vida.
Tomando por auténtica la carta encontrada por la Policía en la oficina de Colodro, Torres destaca que, en la primera parte, Colodro apunta claramente a los responsables de la extrema decisión que iba a adoptar.
“Me engañaron, me dieron la espalda, me mataron”, señala la misiva.
En base a un análisis de contenido, Torres señala que “la carta apunta a la ASFI y al Ministerio de Economía, que eran sus inmediatos superiores”.
“La carta de Colodro apunta a las autoridades”, indicó el analista en diálogo con Asuntos Centrales.
Según Torres, “la expresión más fuertes es cuando dice que me mataron”.
Por eso, “las palabras apuntan a un homicidio-suicidio, la carta muestra que fue inducido a matarse”.
Torres se hizo la pregunta sobre si “Colodro sabía algo más, ¿quizás la lista de algunas personas vinculadas a Arce Catacora y al MAS?
“La falta de ayuda y el abandono lo llevaron a un callejón sin salida”, indicó.
El experto dijo que “hay una alta probabilidad de que Colodro sabía algo más por lo que fue inducido a matarse”.
“Los superiores de colodro parece que lo querían callar, según se desprende de la carta”, afirmó.
Por otra parte, “el ministro Del Castillo no mostró las imágenes de cuando Colodro se lanzó concretamente”.
Por su parte, Alejandro Colanzi remarca que las principales pruebas fueron “contaminadas” con graves consecuencias para la investigación en su conjunto y calificó como “grave” intervención del ministro Del Castillo en medio de la investigación.
«Un ministro no tiene nada que hacer con una investigación. Del Castillo, tendría que ser citado para que diga porqué se involucró. Creo que deberían interpelar al Ministro de Gobierno por este caso», afirmó.
Colanzi manifestó su preocupación por el desarrollo de la investigación.
En primer lugar, «se han contaminado las pruebas. Se ha contaminado la carta, el teléfono, las imágenes».
Consultado sobre qué significa “contaminar una prueba”, Colanzi explicó que es “sacarla de contexto».
El analista llamó la atención por el hecho de que «ni el Fiscal ni la familia hablaron de una carta».
“Al día siguiente es el ministro Del Castillo el que anuncia que hay una carta», alertó.
“Se ha roto el protocolo de protección de la prueba», dijo.
«El ministro fue quien dijo que el teléfono no servía», indicó.
«Todavía falta que los médicos forenses analicen el cuerpo de Colodro», recordó.
«El cuerpo vivo o muerto, habla», dijo Colanzi.
«Solo con una decena de cámaras el ministro da conclusiones. Falta indagar el resto de las cámaras”, afirmó.
Por otra parte, «la carta indica que el suicidio fue inducido. Se debería convocar al director de la ASFI y al ministro de Economía, que eran sus superiores»
«La pregunta es ¿por qué lo indujeron a un suicidio?”, dijo Colanzi.
Lo más grave del caso es que «vemos es que hay una intervención política en el caso».