La pérdida de humedales podría costarle al planeta hasta 39 billones de dólares estadounidenses en beneficios económicos y sociales, advirtió la Convención sobre los Humedales en un informe publicado cuando resta una semana para la 15ª Reunión de la Conferencia de las Partes Contratantes en la Convención sobre los Humedales (COP15), que se celebrará en Zimbabue.
El informe, titulado “Perspectiva Mundial sobre los Humedales 2025: Valorar, conservar, restaurar y financiar los humedales (PMH 2025)”, alertó de que, al ritmo actual, una quinta parte de los humedales de todo el mundo podría desaparecer en 25 años.
Estos ecosistemas proporcionan agua limpia, producción de alimentos, protección contra inundaciones y almacenamiento de carbono, que representan más del 7,5 % del producto interior bruto (PIB) mundial, aunque cubren solo el 6 % de la superficie terrestre.
Sostienen sectores como la agricultura, la acuicultura y el turismo, pero cada año se pierde el 0,52 % de los humedales, lo que disipa cualquier esfuerzo para combatir el cambio climático y el detrimento de la biodiversidad.
“Los humedales financian el planeta y, sin embargo, seguimos invirtiendo más en su destrucción que en su recuperación”, indicó la secretaria general de la Convención sobre los Humedales, Musonda Mumba, en el documento.
“El mundo tiene ante sí una oportunidad de 10 billones de dólares: la restauración de los humedales podría desbloquear estos beneficios, pero se nos está agotando el tiempo”, añadió.
La publicación del dossier se realizó una semana antes del inicio de la COP15, que tendrá lugar en Victoria Falls (Zimbabue) del 23 al 31 de julio bajo el lema “Proteger los humedales para nuestro futuro común”.
Prevenir mejor que curar
Según el informe, desde 1970 se ha desvanecido el 22 % de los humedales del mundo -unos 500 millones de campos de fútbol-, donde África, América Latina y el Caribe encabezan las listas de degradación generalizada.
El documento estipula que la prevención cuesta menos que la restauración, cuyos costos, según el ecosistema, pueden variar entre 1.000 y 70.000 dólares por hectárea de humedal.
El autor principal del informe, Hugh Robertson, remarcó que se necesita una “inversión sostenida” y una “acción coordinada” para revertir la desaparición escalonada de los humedales.
“Son fundamentales para el ciclo del agua del que depende nuestro planeta, para nuestra respuesta a escala mundial al cambio climático, y son esenciales para el bienestar de miles de millones de personas y para proteger especies en peligro inminente de extinción”, detalló.
Cuatro claves para la redención
La PMH 2025 describió cuatro vías para revertir esta situación. Una es integrar el valor de los humedales en la toma de decisiones, donde la planificación tenga en cuenta el uso del suelo, el agua y la economía.
Otra pasa por el reconocimiento de que son “clave para el ciclo del agua”, ya que almacenan, filtran y regulan el agua.
La tercera aboga por integrar los humedales en mecanismos de financiación como los mercados de carbono, que permiten a una empresa la compraventa de créditos para emitir cierta cantidad de dióxido de carbono, y los bonos de resiliencia destinados a proyectos ecológicos.
Y la cuarta propone movilizar recursos públicos y privados para la restauración de los humedales a través de asociaciones que financien acciones sobre el terreno y apoyen a las comunidades locales.
La Convención sobre los Humedales es un tratado internacional que también se conoce como Convención de Ramsar porque se firmó en la ciudad iraquí de Ramsar en 1971, con el fin de ayudar a sus 172 Estados miembros a proteger ecosistemas esenciales para la biodiversidad, la estabilidad climática, la seguridad hídrica y el bienestar humano.
La Convención administra una red mundial de 2.543 Humedales de Importancia Internacional, conocidos como sitios “Ramsar”, que abarcan casi 260 millones de hectáreas en todo el mundo.