Oriente Petrolero enfrenta una nueva etapa de inestabilidad institucional tras la sorpresiva renuncia de Mary Cruz Gisela Aguilar a la presidencia del club. La dirigente presentó su dimisión irrevocable después de dos meses y 13 días en el cargo, alegando “motivos personales”.

Horas más tarde, el directorio del club oficializó la designación del secretario general, Gustavo Gutiérrez, como presidente interino, en apego a los estatutos de la institución. En el comunicado difundido por Oriente, se confirmó que el resto de la directiva se mantiene en funciones.

Este relevo ocurre mientras el retorno de Ronald Raldes continúa fuera del panorama dirigencial. El exjugador y expresidente sigue suspendido por el Tribunal de Ética de la Federación Boliviana de Fútbol, que recientemente amplió por 60 días la sanción contra él y René Urioste, en el marco de una investigación sobre presuntas faltas éticas y supuestos manejos irregulares en la gestión del club.