Dos buses con un centenar de efectivos policiales arribaron a la plaza principal del municipio de Yapacaní. Los oficiales esperan instrucciones para proceder, ya sea en la planta gasífera Sirari o en el pozo Yarará X1, en medio de la tensión creciente por las protestas, informó DTV.
Los agentes se encuentran apostados en el comando provincial a la espera de órdenes, mientras tanto, los manifestantes mantienen cerrada la carretera a la altura del kilómetro 50 de Yapacaní. Se prevé que las fuerzas del orden resguarden la planta gasífera y el pozo Yarará X1, según reportes de ATB y El Deber.
El grupo de protestantes dio un plazo de 24 horas, que vence hoy a las 17:00. Amenazaron con radicalizar su medida de presión cerrando las válvulas del pozo petrolero Yarará X1 si no reciben respuesta del Gobierno.
El martes las organizaciones sociales de la región obligaron a los trabajadores a cerrar las válvulas del pozo Yarará X2 y advirtieron que este miércoles procederán a cerrar otro pozo si no se atienden sus demandas. Esta acción ha colocado a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en una situación crítica, ya que pierde 306.000 bolivianos por el cierre de las válvulas del pozo Yarará X2.
Con la llegada de la policía, se busca proteger la planta de gas y resguardar los pozos petroleros, mientras la situación en Yapacaní sigue siendo tensa y se espera una resolución del conflicto en las próximas horas.