En contacto telefónico, Luis Alberto Alpire, experto en meteorología, advirtió sobre un fin de semana complicado para Santa Cruz. Los vientos del norte, que ya se han comenzado a sentir, están trayendo consigo humareda proveniente de los incendios en la Chiquitanía y el norte del departamento. Alpire adelantó que, lamentablemente, la calidad del aire empeorará, y se espera que el nivel de contaminación alcance niveles "extremadamente malos" entre el domingo y el lunes.
"Los vientos del norte traerán ráfagas de hasta 60 km/h, lo que no solo empeorará la humareda, sino también incrementará las temperaturas a niveles preocupantes", señaló. Se prevé que las temperaturas alcancen los 38°C a partir del sábado, marcando el inicio de una ola de calor que se extenderá hasta el martes, con temperaturas máximas de hasta 43°C en la Chiquitanía.
Alpire explicó que, según la Organización Meteorológica Mundial, una ola de calor se da cuando las temperaturas exceden en al menos 5°C la media habitual durante tres días consecutivos. Para Santa Cruz, cuya temperatura promedio es de 32°C, el registro de 37°C o más durante estos días califica como ola de calor.
Sin embargo, el experto ofreció una nota de esperanza: para el miércoles se prevé un cambio en los vientos que podrían mitigar la situación.
"Esperamos la llegada de vientos del sur acompañados de lluvias leves, lo que ayudaría a disipar la humareda y, con optimismo, a mitigar los incendios en la región", mencionó.
A pesar de esta breve mejora, Alpire indicó que los vientos del norte podrían regresar el fin de semana, volviendo a complicar la situación en Santa Cruz y sus alrededores.