A fines del mes de septiembre, el Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) de Santa Cruz, informó que el fuego impera desde la primera quincena de junio en nuestro departamento, consumió 7.37 millones de Ha. Si se consideran los 40 °C, más las ráfagas de vientos hasta 50 km/h, que regirá este fin de semana, incluso hasta el martes 15 de octubre en la región Chiquitana, donde aún persisten incendios forestales, principalmente en Urubichá y Ascensión en la provincia Guarayos, Concepción, San Ignacio y norte de San José de Chiquitos, seguramente se alcanzará, lamentablemente, las 8 millones de Ha arrasadas por las llamas de estos siniestros, provocados esencialmente por la mano ‘asesina’ del ser humano con oscuros intereses (avasalladores de tierra). Por analogía, cabe se denomine ‘Holocausto Ambiental’, en virtud de que su significado implica la destrucción total de territorio, que en este caso comprende bosque (58%) y pastizales (42%).
Si se compara con la extensión total del territorio departamental (37millones de Ha), implicaría que nuestra riqueza natural habría sido destruida en el orden del 22%,representando el mayor desastre ecológico de la historia, con funestas consecuencias ambientales, reflejados en una menor captación y filtración de agua, inferior generación de oxígeno, deterioro extremo del suelo, destrucción de la biodiversidad, pérdida de refugio de vida silvestre; además de una disminución notoria de la mitigación del impacto del cambio climático.
El costo de la factura será muy alto y se reflejará en un aumento sustancial de las temperaturas, reducción de lluvias, y sequías extremas que incidirán seguramente en menor producción de alimentos para todos los bolivianos.
Lic. Luis Alberto Alpire
Dir. Señor del Clima