La nueva sede de L’arome Café, ubicada en la Calle Chuquisaca, entre Warnes y Ñuflo de Chávez, abrió sus puertas para ofrecer una experiencia que fusiona café de especialidad, gastronomía local y un ambiente cultural.
El local, que atiende de lunes a domingo, de 07:30 a 21:30, busca consolidarse como un punto de encuentro en el corazón de la ciudad.
La casona que alberga esta nueva sucursal es un ejemplo de arquitectura neoclásica tropical, restaurada por el arquitecto Mauricio Lechuga, de Blume Studio, quien mantuvo varios elementos y materiales originales del inmueble. La restauración de este espacio histórico forma parte de un esfuerzo por revitalizar el centro de Santa Cruz y promover la cultura local a través de la gastronomía y el café.
L’arome Café ha sido reconocido por su propuesta de café boliviano de especialidad, con granos de alta calidad provenientes de la región de Caranavi, y por su enfoque en la innovación culinaria. Su menú de brunch, con platos de temporada y su famosa empanada de queso, han hecho de la marca un referente para los amantes del buen comer.
Con esta nueva apertura, L’arome Café no solo fortalece su presencia en Santa Cruz, sino que también busca ofrecer un espacio donde se pueda disfrutar de un buen café en un entorno que rememora el pasado histórico de la ciudad. “Esta nueva sucursal representa un sueño hecho realidad, evocando el recuerdo de nuestros antepasados, quienes tomaban café en el centro de la ciudad y disfrutaban de nuestra cultura”, señaló Humberto Santistevan, CEO de L’arome Café.
Este nuevo local, el cuarto de la cadena, reafirma el compromiso de la marca de ser un referente no solo por su oferta de café, sino también por su contribución al desarrollo cultural y social de la ciudad.