La Policía Boliviana ha reforzado la seguridad de las plazas Murillo y Abaroa ante las amenazas de movilización de los sectores sociales afines al expresidente Evo Morales. Ambos espacios públicos están restringidos al ingreso de la población, salvo situaciones comprobables en los puntos de verificación que ha establecido la Policía.
Los sectores que anunciaron presionar a los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y a las autoridades gubernamentales, exigen que se admita la inscripción de Morales para los comicios del 17 de agosto, pese a que hay sobre él un fallo constitucional que lo inhabilita y no tiene aún un partido aceptado en el Órgano Electoral que le incluya en su plancha.
Desde el Gobierno han señalado que si las manifestaciones que se han anunciado son pacíficas dejarán se desarrollen, pero advirtieron que si buscan generar disturbios o provocar a los agentes de la Policía, se actuará en el marco de las disposiciones legales establecidas.