Santa Cruz enfrenta una semana complicada con la confluencia de dos sectores en paro, afectando servicios esenciales. Por un lado, los trabajadores del sector salud iniciaron este martes un nuevo paro de 72 horas, mientras que los gendarmes municipales mantienen una medida de presión indefinida, cada uno con demandas específicas que buscan ser atendidas por las autoridades.
Los trabajadores de salud demandan un mayor presupuesto para el sistema con el propósito de aumentar los insumos básicos y el cumplimiento en el pago del bono de vacunación. Según los dirigente del sector, la medida busca ejercer mayor presión sobre las autoridades de la Gobernación y del Ministerio de Salud.
Paralelamente, los gendarmes municipales de Santa Cruz continúan con su paro indefinido, exigiendo el cumplimiento de un laudo arbitral que obliga a la Alcaldía cruceña a incluirlos a la Ley General del Trabajo.