El Canciller chileno, Alberto van Klaveren, rechazó este jueves las “expresiones xenófobas hacia el pueblo boliviano” que esgrimió la diputada derechista María Luisa Cordero en una sesión de la Cámara.
“Rechazamos enérgicamente las expresiones xenófobas hacia el pueblo boliviano, las que no representan desde ningún punto de vista el sentir del Estado y del Gobierno de Chile. El racismo y la xenofobia son inaceptables”, publicó van Klaveren en su cuenta de X.
Los dichos de Cordero se dieron el pasado 9 de septiembre cuando, durante una sesión de la Cámara de Diputadas y Diputados, se refirió a la propuesta del candidato presidencial del Partido Demócrata Cristiano de Bolivia, Rodrigo Paz, sobre legalizar autos robados en ese país.
“Desde el nacimiento (los bolivianos) son portadores crónicos de una encefalopatía hipóxica”, afirmó la parlamentaria chilena, agregando que esto explicaría ciertas expresiones que, a su juicio, denotan “tontorronés (testarudez)”.
Estas declaraciones fueron contestadas por el propio mandatario boliviano, Luis Arce, quien las calificó de “racistas y xenófobas”.
Arce subrayó que ambos países “sostienen una relación bilateral sobre la base del respeto y cooperación en el marco de la diplomacia de los pueblos por la vida” y que “no debe afectarse por este inadmisible e infundado pronunciamiento”.
El jefe de Estado boliviano adelantó además que desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia se realizarán “las acciones correspondientes a través de los canales diplomáticos establecidos”.
Bolivia y Chile no tienen relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978, debido a la reclamación boliviana del acceso soberano al océano Pacífico perdido en una guerra librada a finales del siglo XIX.