Las mesas electorales instaladas en Bolivia comenzaron a cerrar a partir de las 16.00 hora local (20.00 GMT) tras ocho horas de votación en la inédita segunda vuelta que se realiza este domingo para elegir al presidente y vicepresidente del país.
En varias de las nueve regiones del país, los jurados electorales ya iniciaron el escrutinio en las más de 34.000 mesas instaladas, según datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Según la norma electoral, las mesas deben funcionar durante ocho horas continuas desde su apertura, por lo que el horario de cierre puede retrasarse en aquellas que demoraron en abrir y también deben permanecer abiertas hasta que vote “el último ciudadano” en la fila, recordó el presidente en funciones del TSE, Óscar Hassenteufel.
En su evaluación de media jornada, Hassenteufel sostuvo que la jornada avanzó “con absoluta normalidad y, en comparación a la primera vuelta, de manera más armónica y sin incidentes de consideración”.
El vocal agradeció a la ciudadanía “por asumir una conducta responsable que está a la altura de este momento histórico” que vive el país y valoró que el cien por ciento de las mesas electorales estaba funcionando “sin ningún problema para recibir el voto de todos los bolivianos”.
Hassenteufel ratificó que el Sistema de Transmisión de Resultados Preliminares (Sirepre) ofrecerá información entre las 20.00 y 21.00 hora local (00.00 y 01:00 GMT del lunes), datos que no sustituyen al cómputo oficial que el TSE espera concluir el miércoles o, como mucho, “hasta el jueves en la mañana”.
El pasado 17 de agosto, los bolivianos votaron para elegir a su presidente, vicepresidente y renovar el Parlamento nacional para el próximo quinquenio.
El senador centrista Rodrigo Paz Pereira y el expresidente conservador Jorge Tuto Quiroga (2001-2002) fueron los dos candidatos más votados en agosto, aunque ninguno obtuvo el porcentaje suficiente para proclamarse vencedor en la primera vuelta.
Por eso este domingo los bolivianos volvieron a las urnas para elegir por primera vez en su historia a su presidente y vicepresidente en una segunda vuelta, mecanismo establecido en la Constitución vigente desde 2009.
Para esta votación, se usa el mismo padrón del 17 de agosto, lo que supone que están habilitadas para votar más de 7,5 millones de personas en territorio boliviano y otros 369.308 ciudadanos en 22 países.
Paz es candidato por el Partido Demócrata Cristiano (PDC) junto al expolicía Edman Lara y Quiroga representa a la alianza Libre junto al emprendedor tecnológico Juan Pablo Velasco.
Quiroga, Velasco y Paz aguardarán los resultados en La Paz, sede del órgano electoral, mientras que Lara dijo que los esperará en la ciudad oriental de Santa Cruz, donde reside.
El ganador tomará juramento como nuevo presidente del país el próximo 8 de noviembre, lo que supondrá también el fin de los 20 años de los Gobiernos del izquierdista Movimiento al Socialismo (MAS).