Hoy se hicieron diversos anuncios del Banco Central de Bolivia.
Luego de 1028 días de oscurantismo estadístico (propio de gobiernos socialistas), el BCB vuelve a publicar las estadísticas económicas semanales, en ellas podemos descubrir varias cosas como la evolución de la base monetaria junto a los agregados monetarios, los DEGs, etc… pero algo que llama la atención es lo que recibió el gobierno como herencia -criminal- del MAS:
Resulta que la nueva administración recibió sólo 52 millones de dólares de divisas, lo suficiente como para bicicletear 1 semana en la importación de combustible, asumiendo que TODAS las divisas se fueran a pagar dicha importación.
Como se señalaba con claridad hace meses, Bolivia estuvo a muy poco de un default y una hiperinflación; de momento, no llegamos ahí gracias a una serie de gestiones que realizaron -y siguen realizando- las nuevas autoridades económicas, gestiones que deben saber comunicar para que la población, líderes de opinión y tomadores de decisión sepan los esfuerzos -imagino que en algunos casos, monumentales- que hicieron para salvar el país de esa bomba de tiempo que dejó el Movimiento al Socialismo.
Como siempre recordaba Ramón Freixa: “si no comunican quiénes son, los demás dirán lo que no son.”
El BCB también anunció diferentes aspectos, entre otros:
– La orientación definitiva que tendrá hacia un tipo de cambio flexible, lo que es técnicamente muy discutible
– La publicación semanal, mensual y trimestral de datos (entre ellos la ejecución del programa fiscal financiero), además del calendario anual de publicaciones, lo que es absolutamente plausible
– La firma de Marcos Fiscales de Mediano Plazo, que genera mayor certidumbre institucional.
