Andrónico Rodríguez, presidente del Senado y candidato presidencial del Bloque Nacional Popular, ofreció un amplio discurso en el que analizó la situación política y social actual de Bolivia, al tiempo que lanzó fuertes críticas al gobierno del presidente Luis Arce. En su intervención, Rodríguez subrayó que el principal obstáculo para el avance del país no es la figura de Evo Morales, sino “su propio gobierno”, marcado por “ineficiencia, autoritarismo y corrupción”.
El dirigente señaló que desde noviembre de 2020, el gobierno debería haberse enfocado en cumplir los compromisos de campaña para mejorar la situación del país. Sin embargo, lamentó que se haya “atrincherado en un espacio para dividir bancadas y organizaciones sociales” y para arremeter contra Evo Morales, lo que ha profundizado la crisis política. “Nuestra batalla y pelea política continúa”, advirtió.
Rodríguez hizo un llamado a la unidad del Bloque Nacional Popular para evitar “sumergirnos en un espacio tan pequeño que pareciera resumirse en la pelea por intereses particulares de poder”. Reiteró que la política debe ser “para el pueblo, las organizaciones sociales y la Bolivia profunda”, que enfrenta problemas graves como la pobreza en las provincias. “Me preocupa de sobremanera que hayamos llegado a esta situación tan delicada”, expresó.
Destacó además la importancia de Evo Morales como “el mayor referente de la historia de Bolivia” y reconoció su capacidad política y su legado, aunque admitió que “todos podemos cometer errores”, y que “de repente nuestro hermano Evo se equivocó electoralizando muy temprano nuestra patria”. Sin embargo, subrayó que “necesitamos encaminar este proceso entre todos, absolutamente todos” y llamó a dejar de lado “las exclusiones, desconocimientos, adjetivos y descalificaciones” para materializar la unidad del movimiento.
En cuanto a la situación política actual, Rodríguez denunció la judicialización de la política y la “guerra sucia” que han intentado desestabilizar su candidatura. A pesar de ello, destacó que los tribunales han dado la vía libre para que puedan inscribirse sin inconvenientes en el proceso electoral. Sin embargo, advirtió sobre el “malestar del pueblo” que, si no se canaliza por vías democráticas, puede expresarse en protestas violentas.
En relación con la oposición, criticó su falta de liderazgo y propuestas claras. “No lograron construir absolutamente nada en estos más de 20 años y en estos cinco años de gobierno”, afirmó, señalando que han convertido la política en una lucha basada en estigmas y ataques personales, especialmente contra Evo Morales y el Movimiento al Socialismo (MAS). “La solución de Bolivia no es eliminar al MAS, sino construir una alternativa de país”, remarcó.
Rodríguez también hizo un llamado a “dignificar la política” y “elevar el nivel del debate”, rechazando las “acusaciones falsas” y la guerra sucia dirigida contra él y su movimiento. Insistió en la necesidad de avanzar con responsabilidad y seriedad, proyectando un programa de gobierno para encaminar a Bolivia hacia “un desarrollo y progreso sostenible” y un futuro seguro para las nuevas generaciones.
Finalmente, resaltó la riqueza y potencial del país, con abundantes recursos naturales como litio, gas, plata y tierras raras, así como una población con “inteligencia y voluntad para trabajar”. Sin embargo, lamentó que falten “políticos con voluntad, decisión y planificación” para llevar adelante las transformaciones necesarias.
“Tenemos el vehículo, la llave y el piloto (…) acogeremos este proceso electoral pensando en Bolivia, pensando en la patria. No hemos venido a dividir, sino a unificar este Bloque Nacional Popular”, concluyó, reiterando su compromiso de seguir adelante “hasta la victoria siempre”.