En su mensaje presidencial por el Bicentenario de Bolivia, Luis Arce Catacora hizo una serie de declaraciones sobre la situación del país y los logros de su gestión. El presidente afirmó con orgullo que el país se ha consolidado como “el país más seguro de América Latina y el Caribe”.
La declaración presidencial se enmarca en un contexto de defensa de su administración, que busca proyectar una imagen de estabilidad y control a nivel nacional rumbo a las Elecciones Generales 2025.
Arce subrayó que el mayor legado de su gobierno es el inicio de un proceso “irreversible de industrialización”. En su discurso, enfatizó que este proceso “ya está en marcha” y que “no es un proyecto, no es un mito, es una realidad, es patrimonio del pueblo boliviano”.
Bajo esta línea, lanzó un ataque indirecto a la oposición, afirmando que “nadie podrá jamás acusarnos de que entregamos las riquezas de la patria a quienes pretenden ser los barones del litio en el siglo XXI”. Con estas palabras, el mandatario defendió la gestión estatal de los recursos naturales y se opuso a cualquier propuesta de privatización.
Finalmente, el presidente se refirió a los desafíos que enfrenta el país, en particular, la crisis climática. Mencionó que Bolivia ha sido “víctima de la crisis climática como nunca antes: sequías, incendios, heladas”. Arce reconoció que la crisis “no respeta fronteras”.