A pocas horas del Censo de Población y Vivienda, el presidente Luis Arce Catacora señaló “que no espera grandes sorpresas” en cuanto a los datos y crecimiento demográfico de los municipios, ya que es normal que tengan mayor cifra de habitantes.
La autoridad se refirió a este tema en un diálogo sostenido con periodistas y realizó un desglose de los avances que se dieron en torno al proceso censal y remarcó que “el Gobierno nacional está cumpliendo su palabra. Dijimos que el 23 de marzo de 2024 iba a haber Censo”.
Según el mandatario, la primera gran ventaja tiene que ver con la actualización cartográfica, señalando que en el Censo de 2012 “no se hizo la cartografía como debería haberse hecho. En realidad, no se hizo cartografía”.
Además, sostuvo que una cartografía georreferenciada ayuda a tratar el tema de los límites y cualquier otro tema que se vaya a resolver, aunque aún hay temas pendientes en torno a este ámbito en algunas regiones.
La autoridad también explicó que el Censo va a tener un resultado “importante para objetivos de política pública y de planificación”, con “todos los argumentos técnicos necesarios que garanticen que las cifras que vayan a arrojar este censo sean las más confiables y tengan la mejor tecnología detrás para hacer un conteo rápido”.
Del mismo modo, observó que el país demanda que la población pueda contribuir y colaborar con el proceso censal para que tener datos precisos y de esta manera los bolivianos y las bolivianas puedan tener con exactitud las cifras que van a servir para continuar con la planificación en los diferentes niveles del Estado.
“Hemos logrado a 845.000 bolivianos y bolivianas como censistas voluntarios. Y, por lo tanto, esto significa con respecto a los censistas que teníamos en 2012, un incremento del 215%. Lo que significa que hay mucha más gente que va a trabajar ahora en el proceso censal. Y con respecto a lo que necesitamos, tenemos cumplida la meta de 125%, como era de esperarse”, ponderó la autoridad.
En esta línea, explicó que los agentes censales visitarán 5,8 millones de viviendas durante la jornada de empadronamiento, así como también se prevé movilizar 545.553 personas, es decir, más del doble del personal que se movilizó en la en el censo de 2012.