El profesor de la Universidad Internacional de La Florida, Eduardo Gamarra, explica los riesgos que enfrenta la democracia estadounidense por la debilidad física y mental del presidente Joe Biden y por las mentiras del expresidente Donald Trump que, aún así, es el favorito para ganar las elecciones del 8 de noviembre en Estados Unidos.
- ¿Cómo puede impactar este fallido debate para Joe Biden y victorioso para Donald Trump en las elecciones de noviembre?
El debate fue verdaderamente penoso. Joe Biden ha sido uno de los políticos más importantes que ha tenido este país en los últimos 50 años gracias a una enorme trayectoria política. Biden en el debate no fue ni la sombra de lo que estábamos acostumbrados a ver. Yo lo conocí en los años 90 cuando él era Senador y verlo así fue bastante penoso. Y los mensajes del Partido Republicanos apuntaban a eso mismos, la incapacidad cognitiva del presidente para enfrentar esta reelección. El Wall Street Journal publicó un artículo donde decía esencialmente eso y el equipo de campaña del Partido Demócrata hizo todo lo posible por desmentir que Biden estaba incapacitado mentalmente para seguir con su postulación. Vimos en el debate un presidente que no solo tenía un problema con la voz, pero sí cognitivamente.
- Llama la atención la declaración de Barack Obama en sentido de que esto es pasajero y que debe seguir adelante, el mismo Biden salió hoy a decir que continuará. ¿No es momento para que de un paso al costado?
- La mayoría de la gente que lo rodea en el Partido Demócrata están en un momento de negación. Están tratando de decirnos que lo que le pasó a Biden el puede pasar a cualquiera. Sin embargo, este es un momento muy serio para el Partido Demócrata y muy serio para el país en su conjunto. En este momento, con un Biden disminuido y un partido en crisis, porque Biden está agarrado esto con saliva, hay algunos candidatos no quieren mostrarse con Biden. Esto lleva a la posibilidad muy seria de que, en noviembre, la victoria de Trump sea tan grande que no solo se lleve la Presidencia sino que se lleve todo el Congreso, varias gobernaciones, legislaturas estatales, y la posibilidad de nombrar a tres nuevos jueces para la Corte Suprema. Esto puede crear un país Republicano de corte “trumpista” por los próximos 40 años.
- ¿Está claro que Donald Trump ganó el debate, pero solo él?
- El debate lo ganó Vladimir Putin. En gran medida por lo que dijo Donald Trump: no financiará a la OTAN y antes de juramentar en enero terminará la guerra porque Ucrania tendrá que aceptar los términos de Putin y con eso terminará el conflicto. Lo que eso significa para Europa y para el mundo construido después de la Segunda Guerra Mundial es enorme, es el final de una Era. Y, sin ir más allá, las promesas de autoritarismo de Donald Trump para los Estados Unidos. Por eso, los europeos están tan interesados en el proceso político norteamericano.
- Un candidato senil con claros problemas de salud, Joe Biden, y otro candidato procesado por la justicia, Donald Trump. ¿Qué pasa con la clase política estadounidense para llegar a este punto?
- Donald Trump no solo está procesado, se lo ha encontrado culpable. Y todos los analistas y medios llegaron a la misma conclusión: Donald Trump no dijo la verdad ni una sola vez. Estos son los mensajes falsos que sus seguidores creen que son verdad. Vivimos en un momento en que las mentiras son verdades y donde la gente vota sobre la base de esa desinformación. Paradójicamente, todo lo que creíamos que era desinformación sobre la situación de Biden, en el debate se confirmó que era verdad. Entonces, si eso es cierto, todo lo que dice Trump es tomado como cierto, pese a que no lo es. El impacto sobre los indecisos, que son la mayoría, es fundamental. Hoy, ningún candidato es el favorito de nadie. Frente a la indecisión, un viejito que pierde el hilo y un vendedor de serpientes, van a votar por el dinámico que parece que tuviera 20 años menos.