Un estudio reciente de la Universidad de St Andrews (Escocia) reveló que el cerebro posee un mecanismo interno, similar a un “reloj de kilometraje”, que permite calcular con precisión la distancia recorrida durante el movimiento. Este hallazgo, publicado en la revista Current Biology, se basa en experimentos realizados con ratas y humanos, proporcionando nuevas perspectivas sobre la navegación espacial y posibles aplicaciones en el diagnóstico de enfermedades neurodegenerativas.
El experimento con ratas
En el estudio, se entrenó a ratas para recorrer una distancia específica dentro de una arena rectangular, recibiendo como recompensa un trozo de cereal al regresar al punto de partida tras completar el trayecto correcto. Los investigadores observaron que ciertas células cerebrales, conocidas como células de red, emitían impulsos eléctricos en un patrón regular correspondiente a la distancia recorrida, actuando como un contador interno de pasos. Cuando el entorno se modificaba, alterando la forma de la arena, el patrón de activación de estas células se volvía errático, lo que llevaba a las ratas a subestimar la distancia y detenerse antes de tiempo.
Réplica en humanos
Para verificar si este mecanismo también existía en humanos, los investigadores replicaron el experimento en una arena de 12 metros por 6 metros, pidiendo a voluntarios que caminaran una distancia determinada y regresaran al punto de partida. Los resultados mostraron que los participantes humanos estimaban correctamente la distancia en un espacio rectangular simétrico, pero cometían errores cuando se alteraba la forma del recinto, reflejando un patrón de comportamiento similar al observado en las ratas.
Implicaciones y aplicaciones
Este descubrimiento ofrece una nueva comprensión de los mecanismos cerebrales que permiten la navegación espacial. Además, podría tener aplicaciones en el diagnóstico de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer, ya que las células cerebrales responsables de este proceso se encuentran entre las primeras áreas afectadas en estas condiciones. Los investigadores expresaron interés en desarrollar herramientas centradas específicamente en la estimación de distancias, como aplicaciones móviles, para evaluar la capacidad de orientación y detectar posibles alteraciones en la función cerebral.
Con información publicada en Infobae