En medio del clima político boliviano rumbo a la segunda vuelta presidencial, la activista María Galindo anunció con firmeza su disposición a moderar el próximo debate electoral luego de que el vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Tahuichi Tahuichi Quispe, la mencionara como posible presentadora para desempeñar ese rol. Por su parte, la Fundación Jubileo hizo un llamado a los candidatos a presentar “propuestas honestas”, evitando demagogia y priorizando el diálogo estratégico para afrontar la crisis.
En declaraciones recientes a RTP y PAT, Galindo rompió el silencio sobre su participación en el debate: “no he recibido ninguna invitación (pero) quiero dejar claro que explícitamente yo deseo ser parte del próximo o los próximos debates presidenciales y vicepresidenciales”, afirmó, agradeciendo además que el vocal Tahuichi la haya propuesto como posible moderadora y manifestando su expectativa de una invitación formal por parte del TSE. “Pero queda claro que yo sí estoy dispuesta, que yo sí deseo… Gracias al vocal Tahuichi, estoy dispuesta a ir. Estoy dispuesta a coordinar con otros colegas…” sostuvo, reiterando su voluntad de intervenciones libres y numerosas, sin restricciones en el formato, ya sean “una pregunta, dos, tres o 34”.
Tahuichi se había mostrado abierto a la idea, señalando que sería “muy interesante” que María Galindo pudiera moderar el próximo debate y afirmando que esa posibilidad se enmarca dentro de una construcción democrática más plural y diversa.
Mientras tanto, desde la sociedad civil, Juan Carlos Núñez, director de la Fundación Jubileo reiteró la necesidad de que los candidatos ofrezcan “propuestas honestas” y eviten discursos vacíos o populistas que puedan entorpecer la gobernabilidad. En un contexto marcado por una crisis económica y política multidimensional, Jubileo destacó que la honestidad debe ser el eje central del proceso electoral y que el vicepresidente debe encarnar una figura capaz de tender puentes con diversas fuerzas políticas. Ante esta realidad, exhortaron a los aspirantes a asumir compromisos serios, abiertos a concertación y diálogo, más allá de slogans o frases triviales.
Destacó, además, la urgencia de acuerdos concretos, realistas y que brinden certidumbre a la población, especialmente en relación con el acceso a créditos internos para vivienda o consumo, sectores que se han visto particularmente afectados por la situación económica. A la par, reclamaron que el debate no se convierta en un espacio complaciente, sino un escenario de preguntas directas, claridad y propuestas precisas “el debate es debate y basta de hacerles preguntas complacientes para que nos sigan dorando la perdiz”, enfatizaron, afirmando que la ciudadanía tiene derecho a saber con exactitud qué plantean los candidatos para el país.
El llamado de Jubileo cobra relevancia debido la expectativa del pueblo boliviano de superar la crisis económica mediante soluciones consensuadas, no impuestas.