El ministro de Economía y Finanzas, Marcelo Montenegro, discrepó abiertamente con el Banco Mundial que proyectó un crecimiento pobre de la economía boliviana de apenas 1,4% para 2024. Según el jefe de la política económica del Gobierno de Luis Arce Catacora, la economía boliviana crecerá un 3,7% este año, 0,7% más que en 2023 que registró según cifras oficiales un 3,0% de incremento.
En diálogo con Asuntos Centrales, Montenegro consideró que no es la primera vez que el Banco Mundial se equivoca en sus predicciones. Algo similar ocurrió el año pasado, según el Ministro, cuando el BM auguró un incremento que -luego- resultó 0,6% menos que lo ocurrido en 2023 que llegó al 3,0%.
Montenegro rechazó los cuestionamientos surgidos de parte de la oposición y de diversos analistas que aseguran que los datos del Banco Mundial están confirmando que el país está en una crisis económica producto de la caída de las Reservas Internacionales y la falta de dólares, el declive de la industria del gas y la escasez de combustibles, el desplome de las exportaciones y el incremento de precios de los alimentos.
“En 2023, Bolivia obtuvo 3% de crecimiento, segunda economía de mayor crecimiento de la región y este año vamos a crecer al 3,7%”, aseguró.
“En abril de 2023 el Banco Mundial decía que el crecimiento iba a ser 2,7%, en octubre 1,9% y finalmente dijo 2,4%. Esta entidad siempre están 0,7% de yerro en sus predicciones”, manifestó.
“El Banco Mundial se equivoca en sus predicciones para la economía boliviana. El organiso tiene errores de 1,1% de diferencia, hay que evaluar cuál es su metodología”, indicó.
“El paro de los 36 días por el censo que duró hasta noviembre de 2022 afectó a la economía en 2023”, señaló.
“Advertimos en 2023 que el paro de los 36 días fue perjudicial y este año el bloqueo de enero por 10 días tuvo sus consecuencias”, dijo.
Sin embargo, “a partir del segundo trimestre de 2023 la economía comenzó a mejorar”
“Eso nos permitió logramos estar entre las tres economías de mayor crecimiento de la región en 2023”, sentenció.
“El Gobierno espera que la economía boliviana va a crecer más que el año pasado, de 3 a 3,7% gracias al impulso de los proyectos industriales de sustitución de importaciones”, explicó.