Para este lunes 7 de octubre, una ola de calor extremo afectará diversas regiones del departamento de Santa Cruz, con temperaturas que alcanzarán los 43 °C en la Chiquitania y 42 °C en Cordillera, mientras que Andrés Ibáñez y Norte Integrado registrarán hasta 38 °C y los Valles Cruceños, 35 °C. Los vientos del norte, con ráfagas de hasta 80 km/h en algunas zonas, incrementan el riesgo de propagación de incendios forestales, especialmente en áreas ya afectadas por la sequía.
El clima comenzará a cambiar entre la noche del martes y la madrugada del miércoles, cuando los vientos viren hacia el sur, trayendo consigo lluvias débiles a moderadas que se mantendrán durante la semana. Sin embargo, se espera que las altas temperaturas y fuertes vientos regresen durante el fin de semana, acompañadas de posibles precipitaciones sectorizadas extraordinarias debido al calor y la humedad acumulada.
En Andrés Ibáñez y el Norte Integrado, las temperaturas oscilarán entre los 18 y 38 °C, con ráfagas de viento que alcanzarán hasta 60 km/h, especialmente el lunes y el domingo. Los Valles Cruceños experimentarán un clima más fresco, con temperaturas que variarán entre los 10 y 35 °C, pero también estarán expuestos a ráfagas de 60 km/h durante el inicio de semana. En Cordillera, la temperatura fluctuará entre los 12 y 42 °C, con vientos que alcanzarán los 80 km/h, sobre todo en Charagua y Cabezas.
La Chiquitania será la región más afectada, con temperaturas de hasta 43 °C y ráfagas de viento de 60 km/h, lo que genera condiciones propicias para la propagación de incendios forestales. Las autoridades advierten que la extrema sequía y la acumulación de material vegetal seco, como arbustos y pastizales, pueden provocar incendios con una simple chispa o colilla de cigarro.
Hasta la fecha, los incendios forestales han devastado 7,3 millones de hectáreas en el departamento de Santa Cruz, lo que equivale al 20% del territorio. Esto ha ocasionado graves daños a los servicios ambientales, como la captación de agua, la generación de oxígeno, la protección de la biodiversidad y la retención del suelo. Además, pone en riesgo la producción de alimentos y agrava los efectos del cambio climático.
Luis Alberto Alpire comparte su reporte semanal para Asuntos Centrales