El viceministro de Régimen Interior, Johnny Aguilera, reveló que la organización de cibercrímenes actuaba como una agencia de préstamos a tasas de usura y sin permisos de parte del sistema financiero formal. Los fondos se “lavaban” a través de estos préstamos y luego se cobraba con extorsiones.
En diálogo con Asuntos Centrales, Aguilera manifestó la preocupación del Gobierno nacional respecto del caso de ciberdelitos ya que coloca a Bolivia en el marco de redes globales de delitos financieros y extorsivos. En este caso, la organización afectaba a deudores en México, Colombia, Perú, Chile y Paraguay desde donde el Ejecutivo ya recibió datos sobre las actividades delictivas de los involucrados.
Hasta el momento, la Fiscalía ordenó la detención de 10 personas, tres de las cuales, el ciudadano chino Lei Z., la boliviana Sofía R. V. de 19 años y el colombiano Miguel A. F. aparece como líderes de la entidad delictiva con otros 7 operadores con diversas funciones para llevar adelante las acciones extorsivas. “Paga o plomo”, les señalaban a los deudores a través de mensajes de texto y telefónicos que ahora las unidades especializadas de la Policía indagan para dar con más implicados.
“Bolivia ya forma parte este nexo con una organización criminal. agregado policial de Colombia y China confirman el caso de esta banda criminal”, explicó aguilera.
“Tenían como objetivo trabajar como agencia de préstamos. es una estructura de carácter criminal, sin licencias para funcionar”, indicó.
“La organización utilizaba “empresas fantasmas” que ocultaban el lavado de dinero en los paraísos fiscales, estamos ante un fraude financiero con posibles vinculaciones con el narcotráfico”, destacó aguilera.
“Antes hemos intervenido a otros centros de ciberextorsión”
“Daban créditos sin requerimientos formales con intereses desproporcionados”, explicó aguilera.
“Estamos ante una organización vinculada al lavado de dinero”, manifestó.
“Ahora estamos viendo que la organización tenía nexos con el narcotráfico”, indicó.
“Hay intervenciones con México, Ecuador, Chile y Perú”, manifestó.
“En Lima (Perú) intervinieron una misma banda en noviembre de 2023 y en diciembre comenzaron a actuar en Bolivia, por lo que estimamos que se vinieron al país una vez perseguidos en el vecino país”, explicó.
“El Chino y el Colombiano eran los líderes esta organización”, aseguró Aguilera.
“Creaban páginas y aplicaciones falsas para llevar a cabo actividades extorsivas”, remarcó.
“Se ganaban la confianza de la gente para sacarle información”
“Las acciones de ingeniería social permitían la acción la banda criminal. Esto ocurre cuando damos información personal”, indicó.
“El phishing es el delito informático que se puso en marcha para estafar a la gente”
“Los estafadores utilizaban técnicas de manipulación emocional con los que engañaban a los usuarios”, manifestó.
“Los delincuentes pudieron haber cumplido con las normas migratorias y laborales del país”
“Las personas estaban entrenadas para enviar mensajes a personas que no los solicitaban”, destacó.