Una propuesta del candidato presidencial Rodrigo Paz, sobre la legalización de los vehículos indocumentados, conocidos como “chutos”, ha generado una fuerte polémica entre Chile y Bolivia. En una entrevista con Asuntos Centrales, el diputado chileno por la región de Arica, Luis Malla, calificó la propuesta de Paz como “hostil” y un incentivo para el robo de autos en su país. Por su parte, el legislador boliviano Miguel Roca negó que su anteproyecto de ley busque legalizar autos robados y acusó a los políticos chilenos de generar un ambiente de hostilidad con “mentiras”.
La postura de Chile
El diputado Luis Malla afirmó que en lo que va del año se han robado más de 600 vehículos en su región, muchos de los cuales terminan en Bolivia. Malla expresó su total desacuerdo con la propuesta de Rodrigo Paz y aseguró que, de concretarse, el robo de automóviles en Chile seguirá aumentando.
“No es posible que un candidato presidencial de Bolivia quiera legalizar los vehículos robados”, manifestó Malla.
Insistió en la necesidad de que Bolivia respete los acuerdos bilaterales de cooperación para combatir el crimen organizado y el robo de vehículos, y manifestó su disgusto por la falta de seriedad que, según él, demuestra la propuesta.
La respuesta de Bolivia
En su defensa, el diputado Miguel Roca negó rotundamente que su anteproyecto de ley busque legalizar autos robados. Calificó como “desinformación” lo dicho por el diputado Malla y aseguró que los legisladores chilenos están generando un ambiente de hostilidad contra Bolivia a partir de “mentiras”.
Roca aclaró que el término “chuto” en Bolivia se refiere a los autos indocumentados, que son el resultado de una “irracional” política fiscal que prohíbe la importación de autos usados y carga con impuestos excesivos a los vehículos nuevos.
“El problema de autos robados en Chile es de ellos”, sentenció Roca, y aseguró que el porcentaje de autos robados en su país es mínimo en comparación con los que se roban en Chile.
El diputado boliviano expresó su disposición a colaborar, pero pidió a las autoridades chilenas que resuelvan su problema sin “achacárselo” a Bolivia.