Santa Cruz se consolida como el departamento con mayor dinamismo en la demanda de créditos del Sistema Financiero, reflejo de la fortaleza de su economía y de la diversidad de sus actividades productivas. Según datos de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), al cierre de agosto de 2025, las colocaciones de créditos en el departamento alcanzaron los Bs 91.525 millones, cifra que representa el 41,3% del total nacional. En los últimos doce meses, el crecimiento de los créditos en la región fue del 6,7%, superando ampliamente el promedio del país, que se ubicó en 3,5%.
El sector productivo es el principal destino de estos recursos, acumulando Bs 50.127 millones, es decir, el 75,4% del total departamental. Las actividades más beneficiadas son la manufactura, la agropecuaria, la construcción y el turismo, que en conjunto concentran el 98% de los créditos productivos. Este comportamiento confirma que el crédito en Santa Cruz no solo estimula el consumo, sino que impulsa la producción, el empleo y la sostenibilidad económica, contribuyendo al desarrollo regional y nacional.
Paralelamente, los depósitos captados por Entidades de Intermediación Financiera (EIF) en el departamento alcanzaron Bs 59.878 millones, distribuidos en más de 5,1 millones de cuentas de ahorro. Este indicador revela la confianza de la población en el sistema financiero y refuerza la capacidad de intermediación de las entidades en la región. En lo referente a los Créditos de Vivienda de Interés Social, Santa Cruz registró un saldo de Bs 11.947 millones, destinados a la adquisición de una vivienda propia. Solo en lo que va de 2025, más de 31 mil familias accedieron a este tipo de préstamos con tasas de interés anual reguladas entre 5,5% y 6,5%.
Finalmente, en cuanto a la cobertura de servicios financieros, ASFI informó que Santa Cruz dispone de 2.887 Puntos de Atención Financiera (PAF), que garantizan presencia en los 56 municipios del departamento, logrando un 100% de cobertura. Este acceso pleno a los servicios financieros consolida al departamento como el epicentro del crédito productivo, de la bancarización y de la inclusión financiera en Bolivia.
La distribución de los préstamos productivos evidencia que la manufactura concentra la mayor participación con Bs 21.620 millones (43,1%), consolidándose como el motor principal de la diversificación económica. Le sigue la agricultura y ganadería, con Bs 16.556 millones (33,0%), reflejando la importancia del sector agroalimentario en la seguridad alimentaria y en las exportaciones. En tercer lugar, la construcción recibió Bs 8.626 millones (17,2%), lo que muestra el dinamismo de la infraestructura y la vivienda. Finalmente, el turismo accedió a Bs 2.455 millones (4,9%), mientras que otras actividades productivas alcanzaron Bs 869 millones (1,7%).
Estos resultados ratifican que Santa Cruz no solo lidera en la colocación de créditos a nivel nacional, sino que también orienta la mayor parte de sus recursos a sectores que fortalecen la producción y la competitividad del país. Según la ASFI, este comportamiento reafirma la capacidad del sistema financiero de acompañar el crecimiento económico de la región con tasas reguladas que garantizan acceso equitativo tanto a grandes empresas como a pymes y microempresas.
Del total de PAF registrados, 1.199 (41,5%) corresponden a cajeros automáticos, 921 (31,9%) a corresponsales no financieros, 411 (14,2%) a agencias fijas, mientras que el resto se distribuye entre oficinas externas (149), terminales de autoservicio (109), ventanillas (44), sucursales (23) y otros puntos (31). Esta amplia red es atendida por 32 Entidades de Intermediación Financiera (EIF), entre ellas 15 bancos, 9 cooperativas de ahorro y crédito, 7 instituciones financieras de desarrollo y 1 entidad financiera de vivienda.
Con este despliegue, Santa Cruz no solo lidera en la colocación de créditos y en los depósitos captados, sino también en la cobertura territorial del sistema financiero, asegurando que los productos y servicios lleguen a toda la población. Según la ASFI, este avance representa un hito para la bancarización y demuestra que el sistema financiero en el departamento es sólido, solvente e inclusivo.