En una conferencia de prensa convocada esta jornada, el alcalde de Santa Cruz y jefe nacional de Unidad Cívica Solidaridad (UCS), Jhonny Fernández, desmintió categóricamente la existencia de un supuesto acuerdo firmado con otras tiendas políticas. “Ese documento es totalmente falso”, aseguró. “Cuando haya algo oficial, lo vamos a anunciar de manera clara”, añadió.
En medio de un escenario político marcado por la incertidumbre, Fernández se refirió a la preocupación generada por la posible inhabilitación de candidaturas desde el Tribunal Supremo Electoral (TSE), lo que ha generado desconfianza generalizada. Señaló que diversas organizaciones sociales, campesinas, gremiales y otros sectores productivos han expresado su alarma ante lo que consideran un clima de inestabilidad.
Frente a esta situación, UCS y la Alianza La Fuerza del Pueblo anunciaron la realización de una asamblea nacional de emergencia convocada por sectores sociales de todo el país. Esta reunión, prevista en la ciudad de La Paz, busca definir una hoja de ruta que permita a las bases asumir un rol central en las decisiones electorales. “La clase política no va a decidir más por el pueblo. El poder vuelve al pueblo”, declaró Fernández.
Entre las principales resoluciones, destaca la propuesta de organizar un gran cabildo nacional multisectorial, en el que campesinos, mineros, gremiales, transportistas, cooperativistas, entre otros, determinarán de forma directa los nombres de los candidatos a la Presidencia, Vicepresidencia, Senado y Diputados. “La alianza La Fuerza del Pueblo se pone a disposición de todas las organizaciones sociales para que ellas definan a sus representantes”, enfatizó.
Fernández también abrió la posibilidad de renunciar a su propia candidatura si así lo determina la asamblea. “Si tengo que dar un paso atrás para darle viabilidad a este proyecto de unidad popular, lo voy a hacer por Bolivia. No voy a anteponer mis intereses personales”, sostuvo.
Consultado sobre figuras como Andrónico Rodríguez y otras alianzas como el MTC o Morena, el líder de UCS fue claro: “No se descarta a nadie, pero ahora las decisiones no las toman los políticos, las toman las organizaciones sociales”.
La convocatoria a esta asamblea y eventual cabildo responde a lo que las organizaciones han calificado como una ruptura con la vieja práctica de pactos políticos entre cúpulas. Fernández subrayó que “se terminó la etapa de que dos o tres dirigentes decidan por millones”, y que ahora los sectores organizados serán quienes “rayan la cancha”.
Finalmente, lamentó los recientes hechos de violencia registrados en los bloqueos del país, donde al menos cinco policías resultaron heridos. “Eso es lo que no queremos. Se tiene que acabar el fraccionamiento y la confrontación política”, afirmó. Reiteró que los sectores sociales están cansados de la incertidumbre, el daño económico y la polarización, y que el momento actual exige que el pueblo defina su destino electoral.