Vicente Cuéllar, rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), asegura que actuó rápido y de forma contundente, siguiendo los mecanismos institucionales previstos en el Estatuto Universitario, para tratar la grave crisis desatada por los audios que involucran al Decano de la Facultad de Humanidades, Alejandro Velarde, donde supuestamente se dan a conocer hechos de corrupción, compra de cargos a cambio de favores sexuales y agresiones contra docentes y estudiantes.
Según Cuéllar, la crisis está focalizada en la Facultad de Humanidades, pese a que las medidas de protesta afectan al conjunto del estamento universitario debido a que los estudiantes tomaron en los últimos 5 días los módulos de la Universidad obligando a interrumpir todas las actividades.
El rector advierte que él no tiene ningún margen para actuar por fuera del Estatuto, como diversos sectores se lo reclaman, como pueden ser la destitución o suspensión del Decano involucrado o la conformación de una comisión especial para investigar el caso.
Todo debe ir por la vía judicial interna, señala el estatuto, a través del Tribunal de Justicia Universitaria a donde Cuéllar como máxima autoridad universitaria presentó una demanda formal contra Velarde y a donde se ha solicitado la “suspensión inmediata” de Velarde.
“Tengo fe en que el conflicto se descomprima desde el lunes”, dijo la autoridad universitaria.
“El Tribunal de Justicia se debería pronunciar lo antes posible”, manifestó.
“La Universidad es una institución democrática y respetamos la protesta. Este es un hecho puntual de una Facultad, Humanidades”, afirmó Cuéllar.
“Esta es una demanda que no depende del Rector de la Universidad. Conocidos los audios, pusimos todo en manos del tribunal de justicia universitaria. Al tribunal le corresponde evaluar las pruebas del caso y recolectar información para tomar una decisión”, destacó.
“Como medida precautoria pedimos la suspensión del decano de humanidades”, indicó Cuéllar.
“El Tribunal Universitario de Justicia puede derivar el caso a la justicia ordinaria en caso de encontrar indicios penales”, explicó Cuéllar.
“Si alguno de los afectados lleva el caso a la justicia ordinaria nos vamos a sumar a esa demanda”, señaló.
“Estamos cumpliendo con el Estatuto Universitario de forma estricta. En este sentido, no tengo competencias para destituir un decano o un estudiante, salvo que haya un hecho flagrante”, manifestó Cuéllar.
“Estoy con las manos atadas de resolver este conflicto, porque depende del tribunal de justicia”
“La decisión no está en manos del rector”, sentenció.
“Hablamos con los estudiantes para que desistan con las medidas de fuerza”
Por eso “pedimos al Tribunal de Justicia Universitaria medidas precautorias sobre el decano para que sea suspendido”.