El exmandatario Evo Morales, a cinco años de haber dejado la presidencia en 2019, denunció este domingo que "ya no hay Estado Plurinacional". Morales recordó el significado que este modelo tenía para él, “los pueblos eran uno solo", pero acusa a la actual administración de haber fracturado esa unidad y señala directamente al presidente Luis Arce de "reprimir y dividir" a la población.
Desde su salida en medio de una crisis política y denuncias de fraude electoral, Morales ha sido crítico de la gestión de Arce, afirmando que el país ha retrocedido “en lo económico, político y social”. El conflicto interno en el Movimiento Al Socialismo (MAS) entre los partidarios de Morales, conocidos como 'evistas', y la facción 'renovadora' encabezada por Arce, ha profundizado la división del partido. Según Morales, los ‘arcistas’ evitan un diálogo que él considera necesario para "reconstruir la unidad" del MAS.
El líder cocalero también cuestionó la imparcialidad del defensor del pueblo, Pedro Callisaya, a quien acusó de servir al Ejecutivo en lugar de defender los derechos de los seguidores del MAS. Estas declaraciones surgen tras una serie de disputas entre el Ministerio de Gobierno y la Defensoría por la liberación de detenidos en los conflictos de Parotani y Mairana. El ministro Eduardo Del Castillo criticó a Callisaya, calificándolo de “defensor de delincuentes”.
Mientras tanto, el 'evismo' se prepara para un ampliado donde evaluará nuevas acciones en respuesta al conflicto dentro del MAS, a medida que se acercan las elecciones presidenciales de 2025. La situación ha generado preocupación entre la población, que teme la instalación de nuevos piquetes y un incremento en las tensiones sociales y económicas.
Hace cinco años, Morales renunciaba a la presidencia desde el Trópico de Cochabamba tras semanas de protestas y la sugerencia del comandante de las Fuerzas Armadas de dar un paso al costado. Hoy, con un MAS fragmentado, Morales intenta volver al poder, asegurando que sigue “por Bolivia, no por intereses personales”.