Durante el debate vicepresidencial organizado por Unitel, Juan Pablo Velasco, candidato a la vicepresidencia por la Alianza Libre, presentó propuestas centradas en el uso de herramientas tecnológicas para enfrentar los desafíos de gobernabilidad en Bolivia. Su planteamiento incluye la implementación de una “democracia participativa digital”, la apertura del Congreso al escrutinio ciudadano y la eliminación del voto secreto en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), reemplazándolo por el voto nominal.
“El Congreso ya no será un espacio cerrado. Vamos a digitalizar la gobernabilidad para que las leyes se debatan con la opinión de todos los bolivianos”, afirmó.
Velasco señaló que con una reforma constitucional se podría establecer un sistema legislativo abierto y participativo, en el que las decisiones públicas se tomen de forma transparente. Sobre la forma de legislar en una Asamblea potencialmente fragmentada, afirmó que la oposición democrática podría alcanzar mayoría, lo que facilitaría los consensos.
“El consenso no es opcional. Es obligatorio. Y con el voto nominal vamos a terminar con los maletines por debajo de la mesa”, indicó.
Preguntas de otros candidatos
Durante el bloque de contrapreguntas, los demás aspirantes a la vicepresidencia dirigieron cuestionamientos específicos a Velasco sobre sus propuestas.
Juan Carlos Medrano consultó:
“No nos has dicho en la exposición cómo vas a generar el consenso en la Asamblea Legislativa. ¿Qué vas a hacer para que se generen los consensos que no hemos tenido en estos 20 años?”
Velasco respondió que todos los representantes electos por voto popular deben participar en el proceso legislativo y que, dada la proyección de mayoría opositora en el Parlamento, el consenso será posible. Propuso institucionalizar el voto nominal obligatorio para reforzar la transparencia y eliminar prácticas como la compra de votos.
Mariana Prado preguntó:
“Su candidato presidencial indicó en sus entrevistas que van a privatizar todas las empresas públicas que le pertenecen al pueblo. ¿Cómo generarán el esquema de gobernabilidad necesario para que esta medida no ocasione miles de pérdidas de trabajo y deje a mucha gente en la calle?”
Velasco respondió que no se trata de una privatización total, sino de quitar los subsidios estatales a empresas que no sean esenciales ni financieramente sostenibles. Aclaró que las empresas que puedan operar sin ayuda pública continuarán funcionando. Mencionó que el déficit fiscal supera el 10% del PIB, y que parte de ese déficit es causado por empresas estatales con bajo rendimiento.
“Si nos volvemos una potencia mundial en papas fritas, que sigan funcionando. Pero si no son viables sin el subsidio estatal, no tiene sentido que las mantengamos”, dijo.
José Luis Lupo formuló esta pregunta:
“¿Crees que Bolivia ha llegado a un momento político que justifica acuerdos como el de la Moncloa, la concertación de Santiago o el Andrés de Santa Cruz aquí en Bolivia?”
Velasco señaló que el sistema político necesita una transformación profunda, y que el consenso debe basarse en sentido común, diálogo directo y respeto al mandato popular. Cuestionó la efectividad de la actual Asamblea Legislativa y propuso un nuevo pacto político sustentado en participación activa y digital.
“Tenemos que cambiar todo. Vos sabés muy bien que todo está podrido”, expresó.
Reforma digital y rol de los jóvenes
Velasco concluyó su participación haciendo un llamado a los jóvenes como actores centrales de su propuesta de transformación institucional. Reiteró que el futuro político del país debe construirse desde la tecnología, la transparencia y la participación directa.
“Bolivia tiene futuro, y el futuro es digital”, finalizó.