Quizás esté pensando que el fin de la Humanidad ha llegado. Ahí están los falsos profetas que vienen pregonando que los cielos se abrirán y el Mesías aparecerá y que debemos prepararnos, mientras van pidiendo el diezmo. ¡Pare de sufrir! Y la gente desesperada, claro los incautos y pecadores, se golpean el pecho y dan por seguro las profecías de ese pastor. Van vaciando sus billeteras yescas.
No es para menos. Guerra en varias partes del mundo a nombre de Dios, Alá, Jehova. La pandemia y otras enfermedades nuevas que azotan a los seres humanos. La Madre naturaleza que va expresándose con furia con inundaciones, tempestades, huracanes, sequías, calores, fríos, etc. Los actos terroristas a cada hora en cualquier lugar del mundo. Las redes sociales que nos bombardean de desastres, violencias, sangre, masacres y claro pensamos que a la vuelta de la esquina está el apocalipsis.
Mi amable amigo lector no es para tanto, no es como morirnos en vida. Y que todo ahora se nos viene abajo, tenemos miles de años por delante, así que mientras tanto tómese la vida con filosofía, con imaginación, con impulsos y si le parece, le mando cinco pasos que puede ir asumiendo, que no les costará un solo centavo para invertir. Solo su tiempo, su capacidad, su disciplina y su voluntad de poder. viva a plenitud su vida y si le tiene que llegar la muerte, con apocalipsis o sin él, igual tenemos que irnos al ataúd.
1. ELIJA LA VIDA
Elija la vida. No hay recetas o polvos mágicos. Tampoco hay un manual especializado o erudito para que elija la vida, la que quiere vivir, no la que le quieren imponer, o acondicionar o construir a sus espaldas. Tienes que decidirse, en serio, procure no tardarse demasiado. Mire a su alrededor, hay cientos de miradas y ambiciones que lo presionarán o decidirán por usted. La vida, su vida, mi vida no tiene por qué tener límites, barreras y fronteras. Es tan universal y única como lo es el universo; es tan abarcadora como cuando los rayos del sol no deja a nadie sin iluminarlos; es tan transparente como las aguas cristalinas de la lluvia, que en cada verano, se hace sentir; es tan hermosa como el jazmín que sus pétalos nos inundan de un aroma que puede durar meses y meses; es tan dulce como el mejor manjar de chocolate que puedan fabricar esas manos suaves, ardientes y pequeñas de las mujeres más bonitas que puedan existir en la tierra; es tan provocadora como los besos de una madre que cuida a su bebé y está dispuesta a dar todo de sí y es tan de este mundo que es el principio y el fin de la humanidad. Es de usted y mía.
2. VIAJE HACIA UNO MISMO
Es muy poco lo que la mayoría de los ciudadanos, entre ellos puedes estar usted, amable lector, y este narrador, que se hayan preocupado en hacer esfuerzos para mirarse en un espejo imaginario y lanzarse una serie de preguntas, cuestionamientos, dudas y acusaciones; es que siempre vemos la paja de nuestros prójimos, sus errores, debilidades y ambiciones, pero cuando se trata de uno mismo, ahí la paramos. Pero al cementerio, hay que prepararse y emprender el viaje más difícil, el que le damos vueltas y vueltas, el más necesario de todos. Aquel que haríamos cada vez que se pueda, mejor si se pasa de largo; el que no cuesta ni un peso, pero no queremos hacerlo. Es el viaje hacia uno mismo, al interior, a su yo, a sus sentimientos y emociones con la meta de pensarse, para mirarse, para sentirse, para descubrirse, para que se descubra y se descubra. Es el viaje más decisivo y más complejo. Aunque no gastarás casi nada o nada. El viaje hacia uno mismo, vacaciones para uno mismo. Tiene que animarse a seguir este camino, este viaje, como sea y a como dé lugar. No necesita pasajes en avión, en tren, en barco, en buses. Tampoco requerirá reservas de hoteles o de los medios de transporte, ni permiso de nadie. No lo piense ni un instante. Le aseguramos que tiene que darse uno y después de su viaje, verá que será un hombre y una mujer a plenitud, a vida llena, a vida con vida, “ser en plenitud”. “Deberíamos ser capaces de sentir la belleza de este ritmo de la vida, de apreciar, como hacemos en las grandes sinfonías, su tema principal, sus acordes de conflicto y la resolución final”, nos interpela Lin Yutang. Indudablemente en este viaje al interior, hacia uno mismo captaríamos ese ritmo vital, nos haríamos absorber y envolver, asumiendo que es también un viaje a esa resolución final, la muerte.
Después de este viaje, será un dominador no del mundo, sino de su propio yo. Un Alejandro Magno para sus reinos, propios e internos.
3. LIDERAZGO EN LA VIDA
El filósofo alemán Enmanuel Kant formuló su idea central: trata a los demás como fines en sí mismos, no como medios para nuestros propios fines. Y en la actualidad el gurú en administración de los recursos humanos, Peter Drucker, asegura que el líder del mañana no podrá dirigir por carisma; tendrá que pensar a fondo las cosas fundamentales, de modo que los demás puedan trabajar de manera productiva. Carisma sí, pero ante todo autoridad y poder de decisión y de mando. Liderazgo para la vida y ante la vida, no sobre la vida ni contra el afán de vivir diariamente.
Hoy en día la figura del líder y de la autoridad en una empresa, compañía, fábrica o consorcio de empresas es más vital que nunca, y de la cual la vida, claro, su vida y la vida de los demás no están exentas. Drucker nos habla de que cuando el buque se está hundiendo no se convoca a una conferencia sino que se dan órdenes.
4. REVOLUCIÓN EN LAS ACTITUDES
Se trata de tener una afirmativa actitud de cambiar y de asumir los errores; archivar la cultura del no, aunque de vez en cuando renazcan las taras y los miedos, que son parte de nuestra integridad como seres humanos: el ser intolerantes ante la crítica del otro; el de no aceptar las sugerencias o propuestas para enfrentar un problema; la falta de actitudes y poca pasión por lo que se cree; el aferrarse a la fuente laboral como medio de subsistencia y no como proyecto de vida y de superación personal; el vivir encerrados en un cascarón; el de mostrar poca humildad; el de no aceptar responsabilidades y actuar como Pilatos, aunque el “cuerpo del delito” o las “pruebas contundentes” saltan a la vista; el de mostrar actitudes individualistas y no aceptar o aceptar a regañadientes el trabajo en equipo. Todo esto son cotidianidades y parte de nuestras culturas y nuestros lenguajes.
5. CREAR Y CULTIVAR EL PROPIO JARDÍN
Crear es la salida, es ese túnel de escape, la alcantarilla por donde debe irse todo lo que destruye. Crear, creación, innovar, innovación, expresarse, expresión, dar. Fíjese que no le estamos pidiendo nada de lo que no pueda hacer. Crear y crearse a cada instante, en cada lugar, en cada estado de ánimo. Ojo que no solo el artista tiene la capacidad de crear. Él crea una obra de arte, una canción, un cuadro pictórico, una película, una pieza teatral, gestos y allí el artista tiene su expresión de su ser, su expresión suprema y su identificación como un ser humano ser social, que está pisando tierra.
Cándido, el personaje de Voltaire, uno de los más profundos y polémicos filósofos de la Francia prerrevolucionaria, después de haber viajado por casi todo el mundo, experimentado castigos y premios de varios reinos e imperios, y haber llevado una vida sin controles, ni medidas, llega a una conclusión, que la deberíamos compartir y asimilarla. El maestro y el discípulo le dan el toque final a la novela de Voltaire:
“Pangloss le decía a Cándido: todos los sucesos están encadenados en el mejor de los mundos posibles; porque si no te hubieran echado a patadas en el trasero del hermoso castillo… si no te hubieran metido en la Inquisición, si no hubieras andado a pie por las soledades de América… si no hubieras perdido tus carneros en el bello país del Dorado no comerías aquí ahora toronjas confitadas y alfónsigos. Todo eso está muy bien –respondió Cándido‒, pero es menester cultivar nuestro jardín”.
Así que mi estimado amigo, no se corte las venas, ni se desespere, no venda todas sus cositas. Tenemos mucha vida por delante, esperando que esos cinco pasos sea de alguna ayuda. Yasoropai.
