El gobierno del presidente Luis Arce excluyó al embajador argentino, Marcelo Massoni enviado por el mandatario Javier Milei, de la ceremonia de recepción de credenciales de seis nuevos embajadores, celebrada en un acto protocolar, realizada en la Casa Grande del Pueblo, el pasado martes 28 de mayo, dijo un portal de noticias de ese país, reportó el sitio BrújulaDigital.
Entonces, Arce solo recibió las cartas credenciales y a los embajadores de los siguientes países: del Reino de Arabia Saudita, Faisal Ibraim Ghulam; de la República de Zimbabue, Meshack Kitchen; de la República de Surinam, Gustaaf Rasiman Sanijadi; de la embajadora de la República de Eslovenia, Mateja Kračun; del Reino de Tailandia, Pisanu Sobhon; y de la República de la India, Vishvas Sapkal.
Un reporte de QPS Política denuncia que ese día, el embajador argentino fue citado a una reunión privada en una acción que no pasó desapercibida.
La publicación precisa que las raíces de la tensión diplomática, entre los gobiernos de Bolivia y Argentina, está en las diferencias entre el Movimiento al Socialismo (MAS) boliviano y el gobierno de Javier Milei que son evidentes desde el inicio del mandato del líder libertario.
Recuerda que antes de la asunción de Milei, en diciembre de 2023, Arce instó a los bolivianos residentes en Argentina a regresar a su país, anticipando posibles tensiones con la nueva administración.
Si bien Milei no ha lanzado ataques directos contra Bolivia, a diferencia de las fricciones con naciones como Brasil, China, México o Colombia, la relación se vio tensa cuando la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, acusó a fuerzas paramilitares iraníes de operar en la frontera boliviana. El gobierno de Arce desmintió enérgicamente estas acusaciones y exigió una rectificación que nunca llegó, tensando aún más los vínculos bilaterales.
Explica que la exclusión de Massoni del acto oficial ha generado reacciones mixtas, en el vecino país. Algunos analistas la ven como una señal clara del descontento boliviano con la administración Milei, mientras que otros la consideran una falta de protocolo diplomático.
El Gobierno argentino aún no ha emitido un comunicado oficial sobre la situación. Se espera que en las próximas horas se aclare la postura de la administración Milei ante este gesto de desaire por parte de Bolivia.
Este episodio ha puesto en tela de juicio el futuro de las relaciones entre Argentina y Bolivia, dice QPS Política, pues queda por ver cómo se desarrollarán los vínculos diplomáticos entre ambos países en el contexto de las marcadas diferencias ideológicas y las recientes tensiones.